Boletín de la Real Academia de la Historia

IV. Sobre la obra titulada Noticias conquenses

En cumplimiento de lo dispuesto por el Excmo. señor Director accidental en 25 del pasado, he examinado la obra titulada Noticias Conquenses, que tengo el honor de devolver á la Academia con los documentos que la acompañan. Su autor es el Sr. D. José de Torres Mena, abogado y ex-diputado, y se compone de un grueso volumen de 883 páginas, en 8.º mayor, de menudos caracteres y estrechos renglones, sin contar su extenso prólogo.

Antes de tratar de la totalidad de la obra, tengo que referirme al excelente trabajo preliminar que la precede, aunque merezca un examen más detenido. Encierra curiosísimas biografías, de todos los conquenses ilustres, algunos de los cuales tendrían sus nombres tan sepultados en el olvido como sus huesos en la tumba, sin la diligencia del laboriosísimo autor, que embebe además en ellas la verdadera historia de Cuenca. Sensible, empero, nos parece que contenga el prólogo pocas noticias militares sobre muchos hechos de que fué su territorio teatro, y que no se extienda más sobre la vida del heroico D. Juan de Cereceda «el de los rebatos,» de cuyas hazañas Berwick, Peterborough y muchos escritores extranjeros se han ocupado más que los mismos españoles.

Habla extensamente de sus moradores, de todas las publicaciones históricas y geográficas de que ha sido objeto la provincia, de su geología, de sus aguas y regadíos, su agricultura y productos; de su población, su estado eclesiástico, su riqueza, sus impuestos, sus caminos y comunicaciones, y en fin, de su instrucción pública en todas las esferas.

La segunda parte, que lleva el título de Nomenclator, es el de todos los pueblos de la provincia, con los datos estadísticos más necesarios para el conocimiento de cada uno.

Casi desde su creación comprendió esta Academia la gran necesidad de estimular á nuestros escritores á tareas monográficas, como historias de pueblos, ciudades y provincias, y aun algunos Académicos les dieron ejemplo, como el insigne Jovellanos, el padre Flórez y otros que no recuerdo en este instante.

Y se explica perfectamente ese interés en la corporación constituida para esclarecer la historia de España, porque no puede emprenderse la obra de un todo con acierto, si no se facilita con la reunión de las partes. De ahí dimana la protección que dispensa hasta con premios anuales á los autores de aquel género de trabajos históricos parciales, protección que el mismo Gobierno les concede también generosamente, como lo consigna el Real decreto de 12 de Marzo de 1875.

Muy de lleno deben alcanzar sus beneficios al laboriosísimo autor de las Noticias Conquenses; porque el que busque las de Cuenca, que no acuda á otra parte más que á su publicación, en donde encontrará todavía más de las que necesite, hasta las que no espere. En efecto: en el capítulo dedicado á la diócesis, hallará un índice biográfico, curioso, entretenido, de todos los prelados que ciñeron aquella mitra, y hasta otro índice nominal é ilustrado de todos los infelices más ó menos judaizantes que allí suplicó la Inquisición. Si cada una de las otras cuarenta y ocho provincias de España tuviera un Torres Mena, se conocerían mucho mejor de lo que se conocen la geografía, la historia, la estadística y hasta las combinaciones del comercio interior de todas ellas.

Conocida la excelencia, la extensión y originalidad de su tarea, no vacilamos en afirmar que el Sr. Torres Mena es el llamado á escribir la historia de Cuenca y su provincia, con muchas ventajas en literatura, juicio y crítica sobre los demás libros de la misma índole que poseemos en España; é ínterin emprende una labor para la que se encuentra ya tan preparado, merece, sólo por sus Noticias Conquenses, todo el favor, todo el apoyo del ilustrado Gobierno de S. M. Esta es la opinión del que suscribe, sometida como siempre á la más acertada de la Academia.

JACOBO DE LA PEZUELA.

Madrid, 8 de Diciembre de 1878.

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Albalate de las Nogueras

I. Villa del partido judicial de Priego; diseminados, aun cuando no lejos de la misma, se hallan tres molinos harineros, otro de aceite, una casa de hortelano y 94 cuevas para guardar vino, y á distancias mayores unos 60 chozos ó albergues de pastores; contiguo á la población está el cementerio con ermita, y como á un cuarto de legua la ermita de Santa Quitéria: componen su población 1.004 habitantes en totalidad. Dista de Cuenca 6 leguas.

II. Paga por contribución de inmuebles, pesetas. ...............9.172

     Por industrial ...................................................................513

     Por consumos.............................................................. 4.148

     Por gastos municipales ..................................................6.228

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Cañaveras
I. Villa del partido judicial de Priego, desde cuya inmediación y á distancias varias se corren diseminados por el término dos molinos de aceite, cinco molinos harineros, dos casas de huerta, una de peón caminero, diez y nueve cuevas para guardar vino y unos cuantos chozos para albergue de pastores; la ermita y casa de la Virgen del Pinar dista media legua de la población, y una el caserío, de seis edificios, anejo á la misma, llamado de Perales: los habitantes 1.024 en totalidad. Dista de Cuenca 7 leguas.
II. Paso á Muñoz Soliva, quien reproduce aquí las raíces kanaha ó canna, medida de seis codos y seis palmos, y baria, que significa término ó fin, como si dijéramos término de las mediciones. Por si no conviene esa explicación, da la de las voces cana, caña y baria; esto es, remate, cabo ó fin de las cañas ó cañaverales; y aún dice que los naturales sacan la etimología de Cañadas verás, mas las raíces hebreas son bien palpables les replica, sin más que mudar el cana en caña y el baria en veras. Por si alguno pudiera creer invención mia este juego de palabras, le remito á la página 76 del tomo primero de la «Historia de Cuenca», en la cual verá también que Cañaveras aunque thobelia es posterior á los thobelios y que les sirvió de mojón ó límite, por haberse hallado en su término ruinas de pueblos en los parajes denominados Llanocastillo y Cerro de los Holléros, con flechas, vasijas y otros útiles.
Según indicaciones de Navarrete en su «Bibloteca Marítima», de Cañaveras fué natural D. Juan Segura, colegial en el Mayor de San Ildefonso de la Universidad de Alcalá y canónigo en la Colegiata de San Justo, autor de una obra de Matemáticas impresa en idioma latino, en Alcalá el año de 1566, donde profesó esta ciencia naciente entonces. También se ocupa Rozabal, en su Biblioteca de escritores colegiales, de este conquense ilustre.
III. Paga por contribución de inmuebles, pesetas.....................................13.032
       Por industrial ........................................................................................943
       Por consumos ....................................................................................6.052
       Por gastos municipales .......................................................................7.526

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Torralba

I. Villa del partido judicial de Cuenca, por cuyo término se hallan diseminadas dos casas de hortelanos, tres molinos harineros y más de cincuenta tinadas de ganados ó albergues; en la distancia de uno á quinientos metros del casco de la población se hallan doscientas cuevas para guardar vino, agrupadas unas y diseminadas otras, practicadas la mayor parte en el sitio llamado Cerro del Castillo, la ermita con casa de Nuestra Señora de las Nieves se halla próxima á la población; y el total de esta lo componen 837 habitantes. Dista de Cuenca 5 leguas.

II. En su tratado sobre la «Población general de España», y página 383 del tomo primero, dice Estrada: «A cinco leguas de la Ciudad de Cuenca está la Villa de Torralva, lo mismo que Torre-Blanca, situada en una cuesta con Muros, y fuerte Castillo: coge razonablemente Pan, Vino, Azeite, y mucha Miel, la mejor de Tierra de Cuenca, que tiene fama, Azafrán, Frutas, y Hortalizas: tiene 400 vecinos en una Parroquia, y dos Ermitas. Poblóse por antiguos Celtiberos años del Mundo antes del Divino Nacimiento»

III. Hay noticia de un D. Luis Salcedo, natural de esta villa, de grande entereza de carácter, distinguido además por sus letras y virtud. Estudió derecho cu Salamanca, y terminada la carrera entró luego á servir Alcaldías; parece que más adelante fué Contador de Hacienda, Consejero de Indias, y que reusó, hacia 1616, la presidencia de la Chancillería de Valladolid.
En Torralba reposan los restos mortales del insigne catedrático Novar (patria in partidas de esta familia), cuya noticia biográfica se consignó en el artículo correspondiente al Castillo de Alvaráñez.
IV. Paga por contribución de inmuebles, pesetas. ........................8.753
      Por industrial ...........................................................................601
      Por consumos........................................................................3.020
      Por gastos municipales ...........................................................5.046

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Villaconéjos

I. Villa del partido judicial de Priego; no lejos de cuyo casco se encuentran situadas la ermita y casa adjunta de La Concepción ; doscientas cuarenta y cinco cuevas para guardar vino, cuarenta y dos casas-pajares en tres grupos, un ventorro, una casa-tejar y cuatro casas-telares ; á mayores distancias, y diseminados también por el término, se hallan un molino harinero y cincuenta y ocho chozos ó albergues de pastores : componen la población total 729 habitantes. Dista de Cuenca 7 leguas.

II. En esta villa nació el 16 de Setiembre de 1822, D. Eugenio Ramón Paje Viejobueno, alumno primero del Seminario conquense, y abogado por la Universidad central, según título que le fué espedido en 6 de Enero de 1848. Inclinado á la profesión, comenzó ejerciendo la abogacía en el Juzgado de Priego, en Valladolid y Cáceres más tarde, desde 1850 á 1854, con motivo de haber sido destinado á los Gobiernos civiles de dichas capitales y en Cuenca desde 1856 á 1865. Distraído de la libre profesión, desempeñó el Juzgado de Garrovillas en 1854; en Junio de 1865 obtuvo el Registro de la propiedad de Cuenca, desde el cual fué trasladado en Mayo de 1872 al de Llerena, y en esta ciudad ha fallecido el 26 de Febrero del corriente año : temprana muerte, acibarada quizá por contrariedades del destino. Como particular y como abogado prestó otros varios servicios, durante, sobre todo, su estancia en Cuenca, habiendo probado también sus aficiones y aptitudes literarias. Publicó en 1846 un «Compendio de ortografía castellana» y un «Tratado elemental sobre delitos y penas»; y en 1870 un bien concertado resumen histórico de la Legislación hipotecaria. Antecedentes, servicios y títulos que le recomiendan á la consideración de los conquenses.
III. Paga por contribución de inmuebles, pesetas. 11.537

      Por industrial .....................................................378
      Por consumos ................................................3.485
      Por gastos municipales....................................5.367

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CUENCA DEL TAJO

Desde el nacimiento de este río en la llamada Fuentegarcía, del término de Frias, pueblo del partido judicial de Albarracin y provincia de Teruel, hasta Lisboa, recorre un curso longitudinal de 777 kilómetros, con un desnivel máximo, por extremo notable, sobre todo hasta Fuentidueña, de 1840 metros. El área superficial de su cuenca está calculada en 5.486.330 hectáreas, regada por nueve afluentes mayores y ciento veintitrés menores.

La dirección primera del Tajo es al N., inclinándose después al E. en la provincia de Guadalajara, y al S., por último, en la de Madrid. Bordea los límites al N. E. del Obispado conquense, que se confunden en el Puente de Pareja con los del Obispado de Sigüenza y Arzobispado de Toledo; lamiendo también, por aquella parte, los confines de la Provincia hacia Buendía, y más bajo los de Leganiel, Barajas y Belinchon; costaneros de los términos de Almoguera, Estremera y Fuentidueña, de aguas allende, en las provincias de Guadalajara y Madrid.

El primero de los afluentes principales al Tajo es el rio Guadiela -llamado ó escrito en tiempos anteriores Gudiella, Guediella y Gurdiella- que naciendo en la fuente de la Muela de la Pinilla, del término de Cueva del Hierro en el partido de Priego, pasa por Beteta, sigue por Badillos y Santa Cristina, se sume entre profundas hoces por los términos de Alcantud, Priego, Albendea y Villar del Ladrón; y sirviendo desde el término municipal de este último pueblo de límite entre las provincias de Guadalajara y Cuenca, se incorpora al Tajo encima del extratégico, extraño y ameno sitio llamado salto ú Olla de Bolargue, donde se hallan dos molinos harineros, y el desembocadero de un canalizo abierto en las rocas del lecho para dar más fácil paso al arrastre de maderas. En la ladera de la áspera y montuosa sierra que se levanta de la parte allá de la confluencia de los dos rios, donde dicen el Desierto, se ven un antiguo convento que fué de Carmelitas descalzos, fundado en 1592 por nuestro paisano el P. Fray Alonso de Jesús María, natural de Villarejo dé la Peñuela, y restos de grutas eremíticas y ermitorios, todo ello convertido en apriscos y hospedajes de montaraces: y sobre el cerro del lado opuesto, jurisdicción provincial de Cuenca y término de Buendía, se hallan las mudas ruinas de una antigua é importante ciudad gótica, conocida por los nombres de Illarcurris, Rocupell, Carrapell, Recaredópolis, y sincopado éste, Recópolis, con el cual fué por fin consagrada, en memoria, se cree, de haber sido fundada por Leovigildo en honor de su hijo Recaredo, para enfrenar por aquella parte á los agresivos celtíberos conquenses. Memorias históricas éstas, que con las de la Gran Tiberia y Fin del Mundo, en otro lugar mencionadas, pudieran servir de motivos para un poema personificado en el Guadiela.

Afluyen á este rio, cuya dirección general es de E. á O., casi todas las corrientes que cruzan la parte N. de la Provincia, siendo las principales las de el Cuervo, Escábas, Merdanchel, Garibay ó Guadiel, Mayor y Jabalera.

Nace el rio Cuervo en la tierra y jurisdicción de Tragacete, comenzando por dar vida á la famosa vega del Codorno; pasa después por Santa María del Val y los baños de Solan de Cabras, para incorporarse al Guadiela por los Badíllos del término de Cañizares. Aprovéchanse sus aguas en las naturales crecidas y por medio de represas, para la conducción de maderas.

Nace el Escábas -que también se ha escrito Esomas y Escuvas- en el mismo término de Tragacete, cerro de Canáges y sitio llamado los Hosquíllos, y aumentado su caudal muy luego con el del arroyo de las Truchas, que nace en los prados de Valdehorguinas, corre al N. O. por Poyatos, Fuertescusa, Cañamares y Priego, donde recogiendo también las aguas del Trabaque, va en tributo con todas al Guadiela, por más bajo, en el término de Albenda. El rio Trabaque, pues, es un afluente del Escábas, que nace en la muela de Pancrudo y Cueva del Morciguillo, término de Las Majadas; pasa por Arcos de la Sierra, Ribatajada, por la profunda y pintoresca hoz de Albalate de las Nogueras y Villaconejos, hasta ser absorbido por el Escábas en tierra de Priego.

Nace el Merclanchel en Cañaveras, y corre en dirección N. por los términos de Canalejas y Castejon hasta el Guadiela, entre los despoblados de Villaverde y Broncháles.

Nace el Mayor cerca del despoblado de Valmelero en la sierra de Cabrejas; pasa con dirección general al N. por Villarejo de la Peñuela, Valdecolmenas de Arriba y de Abajo, Taracena, Taracenilla, Verdelpino de Huete, Moncalvillo y Alcantarilla, hasta el término de Buendía, en el cual tiene su desembocadura al Guadiela, pero recogiendo antes dos afluentes. Uno de éstos es el rio Cauda, que originado en el Borbotón -este nombre de origen le aplican otras veces, llamándole también simplemente el Rio, el Canda y el Cauda, pareciendo este último el más característico y propio- de Huete termina en breve junto al despoblado de Peñahora; el otro afluente es el Guadamejud, que naciendo en Sacedoncillo, corre por Villalbilla, Valdecañas, Culebras, la Ventosa, Villanueva, Peraleja, Portalrubio y Villalba del Rey, y entra en el Mayor por su derecha, cerca del despoblado de Cogolludo, en dirección á Buendía.

Nace el Jabalera entre Vellisca y Mazarulleque, y marchando hacia el N. por Garcinarro y el pueblo que le da nombre, entra por el molino en la sierra de Altomira, en cuyo sitio se contempla uno de los fenómenos geológicos más notables por el levantamiento y pliegues de las capas del terreno; muere en el Guadiela unos cuatro kilómetros más adelante.

Por eso manifiesta el adagio que aunque Tajo es el nombrado, Guadiela le da su principal caudal. El segundo proverbio dice así:

Agua de Tajo,
Hincha la tripa

Y afloja el badajo.

Atribuyendo el dicho á los moradores de la ribera que corre desde Zorita de los Canes á Fuentidueña, porque en aquellos parajes infla mucho el agua del rio y causa flojedad.